Bien sea por personalidad, temas económicos, por temor, por estabilidad, tomar la decisión de dejarlo todo para emprender, lleva consigo una cuota importante de riesgo, si es de los que prefiere ir con más seguridad, lea la siguiente nota y entérese de cómo emprender sin renunciar a su empleo.
Muchas veces tomar la decisión de emprender se dificulta porque en algunos casos significa renunciar a la estabilidad de un empleo y aventurarse en un negocio, donde no siempre hay muchas garantías. Sin embargo, esto no tiene por qué significar un obstáculo, es posible emprender sin tener que renunciar, de momento, a su empleo, si quiere saber cómo hacerlo le invitamos a leer las siguientes recomendaciones.
Pequeños pasos: al no estar dedicado 100% al proyecto de emprendimiento, es importante que se mantenga siempre dando pequeños pasos, que aunque simple vista no le significarán un gran avance, al hacer la sumatoria los resultados hablarán por sí solos. La clave está en no detenerse, es fijar pequeñas metas diarias, que ayuden a progresar y a aumentar su motivación.
Saque provecho de la situación: si bien es cierto que el hecho de no renunciar a su empleo le resta tiempo para su emprendimiento, también es verdad que hay un aspecto positivo y es que mantiene una fuente de ingresos fija. Es el momento de organizarse financieramente para destinar parte de su salario como inversión para ir avanzando en su negocio propio.
El tiempo, su mejor aliado: durante este proceso es fundamental lograr convertirse en un amo del manejo del tiempo, es importante basarse en una buena planificación de los días, para ser lo más eficientes posibles y sacar el máximo provecho a las horas. Cada minuto de su tiempo cuenta para trabajar en su proyecto, es por ello que no puede entregarse a los encantos de la procrastinación.
No lo haga solo: es posible que usted no disponga del tiempo, pero quizás hay un amigo, familiar o alguien de confianza que sí nos pueda ayudar con ciertas tareas, que usted por estar en una oficina no podrá realizar, así que busque ayuda, identifique a esa persona de su entorno que dispone de un poco más de tiempo y delegue algunas cosas.
Establece plazos: la “comodidad” de nuestro empleo actual puede llevarnos a ir postergando las cosas de tal manera que nunca se lleven a cabo. Es por ello, que la planificación juega un papel muy importante, es necesario establecer etapas y fijar plazos para cada uno, ir documentando los avances y hacer los ajustes necesarios para cumplir esos plazos. La rigurosidad será de gran ayuda, fije incluso la fecha en la que desea arrancar su negocio.